Como muchos gatitos, Jineta apareció con su hermano Jordi por los alrededores de una restaurante. Dos salvajitos que apuntaban maneras, jejeje… Al ser pequeñines y correr peligro por esa zona, les cogimos e intentamos que pudieran irse acostumbrando al humano y así ser adoptables. Poco a poco lo han conseguido, Jordi es increíble y muy mimoso a la par que cantarín, adorable. A Jineta le cuesta más, pero vemos que es muy curiosa y poco a poco se va dejando. Estamos seguros de que esta belleza en un hogar en el que al principio la den espacio y tiempo de adaptación, puede ser una gatita encantadora.

Queremos encontrar para ella una familia que tenga mucho amor y paciencia para darle a esta preciosidad lo que necesita…¿puedes ser tu?